Os tengo que decir que el bizcocho de limón que os traigo hoy es otro nivel de bizcocho. Por su textura aterciopelada, por su maravilloso sabor, por su increíble aroma y por su particular aspecto sencillo pero elegante, podemos decir que este bizcocho es el bizcocho de entre los bizcochos y lo digo sin ningún miedo a equivocarme y con total conocimiento de causa, porque de hecho se trata de un habitual en casa. Sin ningún tipo de duda este bizcocho el preferido de mis hijos y el mío también lo sería de no existir el bizcocho de limón y avena, bizcocho del que no puedo prescindir cada día que me levanto para acompañar el café de la mañana…El bizcocho que hoy comparto con vosotros me encanta prepararlo para los niños y también para sorprender cuando quieres tener un detalle dulce con alguien.
Y como siempre o casi siempre en el mundo gastronómico, el éxito de una receta depende en gran parte de la técnica empleada para elaborarla, técnica que por supuesto paso a contaros más abajo.
En francés, origen de este fantástico manjar, recibe el nombre de infiniment citron, que traducido al español sería algo así como infinitamente limón y es que no podía estar más acertado el nombre, ya que la presencia de este cítrico tan utilizado en repostería, es más que evidente, tanto en la masa, como en el almíbar y también incluso en el glaseado final. Y creerme que tanto limón no satura ni cansa en absoluto, diría incluso que todo lo contrario. No se qué tiene este bizcocho que cuando empiezas a comerlo, es difícil decidir cuál será el último trozo. Vais a necesitar pedirle a alguien que os haga el favor de quitároslo de vuestra vista antes de que acabéis con un empacho de bizcocho.
Cuando lo hagáis os daréis cuenta de que no exagero ni lo más mínimo ;) Esta receta de bizcocho de limón la aprendí hace ya algunos años, de la mano de mis profesores, excelentes pasteleros franceses todos y cada uno de ellos….qué bonitos recuerdos guardo de esa época la verdad… He de decir que las recetas que yo tengo de mi etapa como alumna, tienen todos los ingredientes en gramos, incluidos los huevos y los líquidos, así que iré ajustando las medidas a lo que nosotros habitualmente utilizamos en las recetas para no complicarnos demasiado, porque si tengo un interés real en publicar hoy esta receta, es en que la preparéis y disfrutéis tanto como nosotros lo hacemos en casa. Como os comentaba antes, a los niños les vuelve locos este bizcocho, es su preferido con diferencia y siempre que lo preparo se llevan hasta que se termina el bizcocho, una rebanada al colegio para disfrutarla en el recreo.
Normalmente lo que yo hago es preparar dos bizcochos, para el caso tardas lo mismo en preparar uno que dos y cuando ya se han enfriado corto en rebanadas individuales un bizcocho y medio más o menos y congelo cada rebanada envuelta en film transparente. De esta manera tenemos bizcocho listo para disfrutar cuando queramos y como ya os he comentado en otras ocasiones, la congelación no afecta en absoluto a la calidad, textura, frescura o sabor del bizcocho. Basta con sacarlo del congelador aproximadamente una hora antes de ir a degustarlo o también, en caso de querer comerlo de forma inmediata, con unos pocos segundos en el microondas será suficiente para tenerlo listo.
¡Vamos con la receta!
RECETA DE BIZCOCHO DE LIMÓN FRANCÉS
Número de personas: 8
Dificultad: fácil
Tipo de cocina: postres, desayunos, bizcochos.
INGREDIENTES:
Para el bizcocho:
- 180 gr. de azúcar
- 3 huevos M
- 100 gr. de nata 38% MG
- 1/4 de cucharadita de sal
- 180 gr. de harina
- 3 gr. levadura química tipo Royal
- La ralladura de 2 limones
- 60 gr. de mantequilla fundida
Para el almíbar de limón:
- 100 gr. de agua
- 100 gr. de azúcar
- 50 gr. de zumo de limón
Para el glaseado de limón:
- 200 gr. de azúcar glass
- 30 gr. de zumo de limón
ELABORACIÓN PASO A PASO:
- Forramos un molde rectangular con papel de hornear y reservamos.
- Precalentamos el horno a 180ºC.
- Tamizamos juntos la harina, la levadura y la sal y reservamos.
- Derretimos la mantequilla en el microondas o en un cacito a fuego lento y reservamos también.
- Batimos los huevos con el azúcar a velocidad media. Cuando la mezcla adquiera una consistencia esponjosa y ligeramente blanquecina y sin parar de batir añadiremos la nata y la ralladura de limón.
- A continuación vamos a añadir la harina con la levadura y la sal a cucharadas, sin prisa pero sin pausa. En el momento que añadamos la última cucharada de harina, pararemos de batir con el fin de evitar que la masa desarrolle más gluten del deseado hecho que haría que nuestro bizcocho resulte seco y poco esponjoso.
- Agregamos ahora la mantequilla derretida a la mezcla anterior y la integraremos cuidadosamente con ayuda de una espátula y con movimientos envolventes.
- Vertemos la masa en el molde que teníamos reservado y lo introducimos en el horno. Bajamos la temperatura del horno a 160ºC.
- Mientras se cocina nuestro bizcocho iremos preparando el almíbar y para ello pondremos el agua con el azúcar al fuego en una cacerola. Cuando comience a hervir, retiraremos el cazo del fuego y añadiremos el zumo de limón que previamente habremos pasado por un colador para retirar la pulpa que haya quedado después de exprimir los limones. Reservamos.
- Dejamos que el bizcocho se cocine a esa temperatura durante 50 minutos o hasta que al pinchar en el centro con un palito o brocheta comprobemos que éste sale completamente limpio y seco.
- Sacamos el bizcocho del horno y con ayuda de un palillo iremos agujereando el bizcocho por varias partes con el fin de ayudar a el almíbar a penetrar por él.
- Sin sacar todavía el bizcocho del molde, vertemos cuidadosamente el almíbar por toda la superficie del bizcocho tomando la precaución de llegar a todas las partes, esquinas, bordes y centro.
- Desmoldamos el bizcocho y lo colocamos sobre una rejilla.
- Mezlcamos el azúcar glass previamente tamizado con el zumo de limón que igual que comenté más arriba previamente lo habremos pasado por un colador para retirar la pulpa que haya quedado después de exprimir los limones. Debemos lograr un glaseado con textura un poquito más líquida que la cola de pegar. No debe ser un glaseado demasiado líquido porque no se apreciará pero tampoco demasiado espeso porque no lograremos el efecto que buscamos y es que cubra completamente el bizcocho con una sutil pero perceptible capa. Si vemos que antes de agregar el glaseado no hemos logrado la consistencia deseada, lo corregiremos añadiendo más azúcar glass o bien más zumo de limón según sea el caso.
- Vertemos el glaseado sobre el bizcocho y lo introducimos durante 10 minutos en el horno con el fin de que el glaseado se seque y solidifique.
Algunas aclaraciones:
- No es fundamental, pero si tienes los ingredientes a temperatura ambiente facilitará la mezcla de los mismos.
- Si te das cuenta la receta lleva muy poca cantidad de levadura química y esto es, porque queremos conseguir una miga apretada pero suave, aterciopelada y esponjosa al paladar. El correcto batido de huevos y azúcar es la clave para obtener esta textura.
- No te preocupes si no logras la consistencia del glaseado a la primera, es normal. Si ves que te ha quedado demasiado fino una vez se lo has añadido al bizcocho, repítelo y dale la consistencia y el espesor correcto y vuelve a vertérselo sobre el bizcocho y no te preocupes porque se fundirá con la capa anterior.
- Es muy importante tamizar el azúcar glass del glaseado, si no lo haces te quedarán pequeños grumitos de azúcar que afearán mucho el resultado final.
4 comentarios
Tiene una pinta deliciosa!! El siguiente bizcocho que haga, será este
Hola Ana querida !! :)) te va a encantar, estoy segurísima de ello. No te olvides contarme qué te parece cuando lo hagas porfa. Te mando un beso enorme lleno de cariño.
Hola mi querida Bea, deseando saber de ti soy Esperanza, por sino me recuerdas, me da una gran alegría de poder encontrarte espero volver a verte,dime si estás haciendo cursos para asistir un abrazo grande
Hola mi Esperanza querida, ¿cómo olvidarte? no sabes la ilusión que me hace volver a saber de ti :) Espero que la vida vuelva a cruzar nuestros caminos en algún momento. Actualmente imparto únicamente cursos personalizados pero no descarto incorporarme en algún momento a alguna escuela para volver a compartir mi amor por la pastelería y por la cocina :))
Un beso y un abrazo enorme y gracias por tu apoyo y por estar ahí…