Bizcocho de Avena y Plátano: Suave, Nutritivo y Fácil de Hacer
Hoy, además de enseñaros a hacer este fantástico bizcocho de avena y plátano, me gustaría hablaros de la riqueza inmensa en lo que harinas se refiere y os animo además a que experimenteis con todas ellas porque de verdad, marcan la diferencia en los postres.
Normalmente tendemos a hacer tartas, bizcochos o galletas con harina de trigo sin saber que sustituyendo una parte o su totalidad por otros tipos de harina, enriquecemos y de qué manera el postre en cuestión. Se me está ocurriendo que os podría explicar un poco los tipos de harina y para qué se emplea cada uno en repostería. Si no te interesa mucho esta explicación, puedes pasar directamente a la receta. :-)
A estas alturas seguro que sabéis que la harina es un ingrediente básico en la elaboración de tartas, bizcochos, magdalenas o galletas. Se obtiene de moler diferentes cereales tales como trigo, avena, soja, arroz, cebada, garbanzos, maíz o centeno. Lo que la harina va a aportar a tu postre, principalmente va a ser forma y consistencia.
Las harinas las clasificamos según la cantidad de proteína o gluten que contienen y que va a ser lo que determine su fuerza y por lo tanto su uso concreto en pastelería. Así hablamos habitualmente de harinas flojas, harinas de media fuerza y harinas de fuerza.
La harina floja o blanda (0000) es más blanca ya que está más refinada es la que contiene menos cantidad de gluten (hasta un 9% de proteína por cada 100 gr.). Esta será la que utilicemos en pastelería normalmente en masas que no necesiten contener aire ya que al tener poca cantidad de gluten no son idóneas para atrapar el aire y contenerlo en la masa.
Estas harinas por lo tanto no nos servirán para hacer panes por ejemplo, pero sí masas como churros, crepes, gofres, masa quebrada, bizcochos sin levadura o con levadura química tipo Royal (magdalenas, sobaos, plum cakes, brownies o buñuelos).
Para estos últimos será necesario batirla, ponerla en un líquido y lo que es muy importante, será necesario añadirle un impulsor químico tipo Royal para empujar la masa hacia arriba ya que como os he explicado, no es capaz por sí misma de atrapar el aire y contenerlo en la masa.
La harina de media fuerza o panificable (00) contiene una mayor proporción de gluten que la anterior ( entre 10 y 11,5 de proteína por cada 100 gr.). La utilizaremos siempre en la elaboración de panes ya que su alto contenido en proteínas hace posible la formación de gluten y por tanto elasticidad. Conseguiremos un buen leudado de las masas sin que éstas pierdan su forma.
La harina de fuerza (000) posee un color más cremoso y una mayor proporción de gluten (entre 12 y 13,5 de proteína por cada 100 gr.). Este tipo de harina lo utilizaremos en productos que requieren amasado y para masas que requieren fermentaciones muy prolongadas y que además estén enriquecidas con grasas y azúcares. Es la ideal para hacer panes y masas hojaldradas y elásticas. Estas harinas cuanto más se amasen mayor elasticidad adquirirán debido al alto nivel de proteína que contienen como os dije en el apartado anterior. Así esta harina es ideal para elaborar masas tales como croisants, hojaldre o el clásico roscón de Reyes.
El conocer los distintos tipos de harina nos ayuda a entender un poco más la repostería y por tanto el comportamiento y reacción de las diferentes masas con las que trabajamos. Ocurre lo mismo con los distintos tipos de levaduras o de azúcares. En siguientes entradas os iré informando de estos ingredientes y otros tantos que utilizamos habitualmente para hacer nuestros postres y que el correcto o incorrecto uso de los mismos hace que tengamos mayor o menor éxito en el resultado final de nuestra receta.
Ahora sí, paso a explicaros cómo he hecho este bizcocho de avena y plátano con textura húmeda y con un intenso sabor debido a la mezcla del plátano, la canela y la miel. No es una masa compacta como la de cualquier otro bizcocho ya que al tener una considerable cantidad de copos de avena, estos hacen que se desmigue más fácilmente. Os lo recomiendo definitivamente por su sabor, por su textura y por el gran aporte de vitaminas y fibra que contiene.
Receta de bizcocho de avena y plátano:
Dificultad: fácil
Raciones: 8 personas
Tiempo:
- Preparación: 15-20 minutos
- Horneado: 45 minutos
Utensilios:
- Molde redondo o rectangular
Ingredientes:
- 175 gr. de copos de avena
- 60 gr. de harina de trigo
- 60 gr. de harina de trigo integral
- 60 gr. de salvado de trigo o de avena
- 2 huevos
- 40 gr. de azúcar moreno de caña
- 80 gr. de mantequilla a temperatura ambiente
- El puré de dos plátanos
- 1/2 cucharadita de sal
- 1/2 cucharadita de bicarbonato de sodio
- 1/2 cucharadita de levadura química tipo Royal
- 1/2 cucharadita de canela
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- 25 gr. de miel
Paso a paso para preparar el bizcocho de avena y plátano:
-
Precalienta el horno a 170º C y engrasa un molde alargado.
-
Mezcla los ingredientes secos. En un bol, combina los copos de avena, las harinas, el salvado, la sal, el bicarbonato, la canela y la levadura.
-
Bate la mantequilla y el azúcar. Con una batidora, bate la mantequilla con el azúcar hasta que adquiera una consistencia esponjosa y haya blanqueado ligeramente.
-
Añade los huevos. Incorpora los huevos, uno a uno, batiendo bien entre cada adición para asegurarte de que se integren completamente.
-
Incorpora los ingredientes líquidos. Agrega el puré de plátanos, la miel y el extracto de vainilla a la mezcla, batiendo hasta formar una masa cremosa y homogénea.
-
Añade los ingredientes secos. Incorpora la mezcla de harinas que tenías reservada, mezclando hasta que se integren completamente.
-
Vuelca la masa en el molde. Coloca la masa en el molde previamente engrasado y extiende bien.
-
Hornea. Introduce el molde en el horno y hornea durante aproximadamente 45 minutos o hasta que al pinchar con un palito, éste salga completamente limpio.
-
Deja enfriar. Retira el bizcocho del horno y deja reposar 5 minutos en el molde sobre una rejilla. Después, desmóldalo con cuidado y deja enfriar completamente sobre la rejilla.
Consejos para que tu bizcocho de avena y plátano quede perfecto:
-
Usa plátanos bien maduros. Es crucial que los plátanos estén muy maduros para que el bizcocho tenga el sabor y el dulzor ideales. Cuanto más maduros estén, mayor será su sabor y su capacidad para endulzar naturalmente el bizcocho sin necesidad de añadir azúcar extra.
-
Elige las harinas adecuadas. En la receta se mencionan diferentes tipos de harinas, y habrás notado que en algunos países, como Argentina y otros de Sudamérica, se clasifica la harina con más o menos ceros. Asegúrate de seguir la equivalencia para lograr la textura perfecta. La harina 000, por ejemplo, es más refinada y adecuada para bizcochos esponjosos, mientras que la 0000 es más suave y perfecta para postres.
-
No sobre mezcles la masa. Cuando añades los ingredientes secos a la mezcla húmeda, hazlo con movimientos suaves para evitar que el bizcocho quede denso. Mezcla hasta que todo esté justo integrado, sin batir en exceso.
-
Cuidado con la temperatura del horno. Cada horno es diferente, por lo que puede que necesites ajustar la temperatura ligeramente. Para asegurarte de que el bizcocho no se dore demasiado rápido, puedes probar con 160º C si tu horno tiende a calentar muy rápido.
-
Deja reposar el bizcocho antes de desmoldar. Es importante dejar que el bizcocho repose durante unos minutos dentro del molde antes de desmoldarlo. Esto ayuda a que se asiente y no se rompa cuando lo saques.
-
Disfrútalo con acompañamientos. Este bizcocho es delicioso por sí solo, pero puedes elevar su sabor sirviéndolo con nata montada o helado de vainilla. ¡Una combinación irresistible que le dará un toque aún más delicioso!
7 comentarios
Genial explicacion de las harinas, perfecto!!! :) Y el bizcocho una maravilla, sabeis que me recuerda a otro postre americano que ahora no me sale el nombre? es tipo así, mas denso, mas compactado, ains cuando me salga el nombre os lo digo ;)
Besotes!!!!
Me alegra que te guste Bea, pienso que siempre viene bien saber un poco con qué trabajamos para mejorar nuestros postres que ya que los hacemos con tanto cariño e ilusión mejor si los ingredientes también acompañan. Tienes un pedazo de blog guapa, me encanta! Besotes!
[…] gr. de harina floja o de […]
Hola buenas tardes,podría usar otro tipo de harina ,no puedo usar de trigo.
Un saludo y gracias.
Hola María, claro que sí, sustituye los 60 gr. de harina de trigo por una sin gluten, o bien de las que vienen preparadas o por harina de maíz por ejemplo. Ya me contarás qué tal te sale. Un beso guapa!
HOLA amiga. Por fa una receta q no contenga ni harina de trigo ni azucar ni mantequilla. Grcs.Felicitaciones por tu labor de compartir tus conocimientos asi es que transcendemos en la vida y no pasamos sin dejar nada a cambioo de esta santa bendicion de dios.
Hola Angeles, la verdad es que no soy muy experta en intolerancias y no me atrevo a recomendarte recetas de ese tipo sin contrastarlas, lo que sí te digo es que hay muchos blogs especializados en intolerancias y llenos de cosas muy ricas para que todos podamos comer de todo! Muchas gracias por tus palabras, un beso fuerte!