Turrón de yema tostada

por Bea
presentacion de turron de yema tostada

Turrón de yema

Hacía mucho tiempo que tenía ganas de publicar esta entrada de turrón de yema tostada. A pesar de los días intensivos de estudio que estoy teniendo, encontrar un huequito y sentarme a escribir en el blog es para mí una manera de relajarme y desconectar un poco de tanta presión.

Tengo el examen para obtener el primer de los tres certificados de cocina francesa que me llevarán a conseguir el Grand Diplôme por Le Cordon Bleu en pocos días y las prácticas de las técnicas y las horas que requiere estudiar toda la parte teórica ocupan gran parte de mis horas en estos días.

Pero aún así ¿sabéis en qué empleo el tiempo que me tomo de descanso? Sí, jeje no podía ser otra cosa que en cocinar y en este caso os quiero enseñar una fantástica receta de turrón de yema tostada, el preferido de Luis y después del de chocolate, el mío también. Es facilísimo de hacer y me parece una opción perfecta para llevar a casa de tus familiares o amigos en estos días de tantísimas celebraciones.

En casa no éramos grandes consumidores de dulces navideños hasta que empecé a hacerlos yo misma y la cosa cambió radicalmente y es que tanto las cosas de bollería como el roscón de Reyes como el panettone italiano o cualquiera de los turrones y polvorones, son completamente diferentes cuando los haces tu mismo a cuando los compras en un supermercado.
Si no tienes un molde específico para turrón no te preocupes, lo puedes hacer tú mismo cortando el lateral de un tetrabrik de leche o zumo y forrando la parte de dentro con una tira de papel de horno, esto último con el único fin de poder desmoldar tu turrón sin ningún problema.

Turrón de yema

Receta de turrón de yema tostada:

Dificultad: fácil

Raciones: 1 turrón

Tiempo:

  • Preparación: 20 minutos
  • Enfriado: 6 horas

Utensilios:

  • molde rectangular para turrón (si no tienes, más abajo te explico como prepararlo tu mismo de forma casera).
  • cacerola y bol para baño maría

Ingredientes para un turrón de yema tostada

  • 250 gr. de almendras crudas y peladas
  • 3 yemas de huevo
  • 1/2 cucharadita de canela molida
  • 1 cucharadita de ralladura de limón (más o menos 1/4 de la piel de un limón)
  • 125 gr. de azúcar
  • 40 gr. de agua

Paso a paso para turrón de yema tostada:

  1. Comenzamos poniendo juntos en un bol la canela, la ralladura de limón y las yemas. Mezclamos todo bien con ayuda de unas varillas y dejamos reservado.
  2. Trituramos las almendras en un robot de cocina. Es importante no triturarlas en exceso, ya que si pasamos la cantidad de segundos, podría separarse la grasa de las almendras, lo cual no serviría para hacer el turrón.
  3. Preparamos el almíbar. En un cazo, ponemos a calentar el agua con el azúcar. Dejamos que el azúcar se disuelva y hierva a fuego bajo hasta alcanzar la temperatura de 118ºC. Si no disponemos de un termómetro, podemos comprobar el punto del almíbar echando una gotita en un vaso con agua fría y tratando de moldearla. Si podemos formar una bolita pegajosa, el almíbar está listo.
  4. Añadimos el almíbar muy poco a poco a la mezcla de yemas. Con ayuda de unas varillas, iremos mezclando todo sin parar de añadir el almíbar en forma de hilo.
  5. Incorporamos las almendras molidas. Cuando el almíbar esté totalmente integrado, añadimos las almendras molidas y las integramos bien en la mezcla con ayuda de una espátula.
  6. Rellenamos el molde de turrón. Alisamos bien la superficie con ayuda de una espátula y lo introducimos en la nevera. Dejamos reposar un mínimo de 6 horas (mejor si es de un día para otro).
  7. Desmoldamos el turrón. Después del tiempo de reposo y enfriado, sacamos el turrón de la nevera y lo desmoldamos.
  8. Tostamos el turrón. Cubrimos la superficie con azúcar y lo tostamos con ayuda de un soplete para conseguir ese toque dorado y crujiente característico.

Turrón de yema

Turrón de yema

Algunos consejos para que te salga el turrón de yema tostada perfecto:

  • No triturar demasiado las almendras: Asegúrate de triturar las almendras de manera uniforme, pero sin pasarte, ya que si las trituras en exceso, pueden liberar grasa, lo que afectaría la textura del turrón. Es mejor que queden trozos pequeños pero no polvo.
  • Controlar la temperatura del almíbar: El punto del almíbar es crucial. Si no tienes termómetro, haz la prueba de la gota en agua fría. Si puedes formar una bolita pegajosa, es que está listo. Un almíbar demasiado líquido o seco puede alterar la consistencia del turrón.
  • Añadir el almíbar lentamente: Cuando agregues el almíbar a las yemas, hazlo en un hilo muy fino y no de golpe. Esto evitará que las yemas se cocinen de manera desigual y que se forme una mezcla demasiado líquida o grumosa.
  • Mezclar bien las almendras: Asegúrate de integrar bien las almendras trituradas con la mezcla de yemas y almíbar, usando una espátula. No dejes que queden restos de almendras sin mezclar para asegurar que el turrón tenga la textura correcta.
  • Dejar reposar en la nevera el tiempo necesario: El reposo del turrón es esencial para que adquiera la textura adecuada. Déjalo enfriar un mínimo de 6 horas en la nevera (mejor si lo dejas de un día para otro). Esto ayudará a que se asiente bien y sea más fácil desmoldarlo.
  • Desmoldar con cuidado: Una vez que el turrón esté completamente enfriado, desmóldalo con mucho cuidado para evitar que se rompa. Utiliza un molde adecuado que no sea difícil de desmoldar, como los de silicona.
  • Tostar con el soplete con cuidado: A la hora de tostar el azúcar en la superficie, hazlo con un soplete de cocina, manteniéndolo a una distancia prudente para que no se queme en exceso. El azúcar debe dorarse de manera uniforme para que el turrón tenga ese acabado crujiente y dorado.
  • Eliminar la canela o sustituirla por ralladura de naranja o mandarina: Si prefieres un sabor más suave, puedes suprimir la canela y reemplazar la ralladura de limón por naranja o mandarina, lo que aportará un toque cítrico diferente y delicioso.
  • Conservar adecuadamente el turrón: Una vez que el turrón esté listo, envuélvelo en film transparente para mantenerlo fresco por más tiempo. Guárdalo en la nevera para que conserve su textura y sabor durante varios días.

Para elaborar tu propio molde de turrón casero sigue estos sencillos pasos: 

  1. Usa un cartón adecuado
    Utiliza un cartón de leche o jugo de 1 litro, ya que su forma rectangular es perfecta para hacer un molde de turrón.
  2. Corta la parte superior y ajusta la altura
    Con unas tijeras, corta la parte superior del cartón (por donde normalmente viertes el líquido) para abrirlo completamente. Luego, recorta los laterales a unos 4-5 cm de altura, dependiendo de lo grueso que quieras que sea el turrón.
  3. Limpia el interior del tetrabrick
    Lava muy bien el interior del tetrabrick con agua caliente y jabón para eliminar cualquier residuo. Asegúrate de enjuagar bien y dejarlo secar completamente.
  4. Forra el molde con papel vegetal
    Recorta un trozo de papel vegetal lo suficientemente grande como para cubrir la base y los lados del cartón. Colócalo dentro del molde y presiónalo bien para que quede ajustado. Si el papel tiende a moverse, dobla los bordes hacia afuera o usa pinzas para mantenerlo en su lugar.
  5. Refuerza el molde si es necesario
    Si el cartón quedó algo débil después de recortarlo, puedes reforzarlo envolviendo el exterior con cinta adhesiva o pegando una capa adicional de cartón por fuera. Esto ayudará a mantener la forma del molde mientras el turrón se enfría.
  6. Desmolda y recicla
    Una vez que hayas preparado el turrón, simplemente desmóldalo con cuidado y recicla el cartón. Este método es práctico, económico y también ecológico. ¡Listo para disfrutar de tu turrón casero!

Este truco te permitirá hacer un molde funcional con materiales reciclados y sin complicaciones.

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2 comentarios

Paloma 12 de diciembre de 2017 - 19:08

Hola, Bea, parece delicioso y seguro que lo intento, pero quería saber si no se podría usar almendra ya molida de fábrica, lo que se conoce como harina de almendra. Gracias!

Responder
Bea 19 de diciembre de 2017 - 17:12

Hola Paloma, sí que podrías utilizarla lo que pasa es que el resultado no es igual de bueno ya que la almendra sin triturar conserva un sabor y aroma que se pierde con el triturado. Un beso y que tengas felices fiestas :)

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