El puré de calabaza casero es un básico que puedes usar en una infinidad de preparaciones dulces y saladas. Es fácil y rápido de hacer, no lleva ingredientes añadidos, y el sabor no tiene comparación con el que viene envasado. ¡Además, puedes aprovechar todo, incluso el jugo que resulta después de haber colado el puré.
La verdad es que he perdido la cuenta de cuántas calabazas habré asado ya para conseguir el puré y preparar con él ricos postres como estos que ya compartí en su día con vosotros: Cookies de calabaza, Pan de calabaza y chocolate, Brownie de chocolate y calabaza, Tortitas de calabaza, Bizcocho de calabaza, Bundt Cake de calabaza y chocolate, Panellets de calabaza, Pan de calabaza, Tarta de calabaza, Muffins de calabaza con pepitas de chocolate, Bizcocho de calabaza con pepitas de chocolate, Buñuelos de calabaza y Bundt Cake de calabaza.
Y es que este fantástico ingrediente aporta en todos tus postres y platos una jugosidad y textura excepcionales. Yo además suelo asar más de una calabaza y después congelo el puré en porciones de aproximadamente 300 g., lo que hace que siempre lo tenga disponible para en cualquier momento preparar algún dulce o cocinar algún plato otoñal.
Aquí te enseño cómo prepararlo y sacarle el máximo partido en tus recetas.
Puré de calabaza casero
Dificultad: Fácil
Raciones:
Depende del tamaño de la calabaza o si asas más de una calabaza, obtendrás más o menos cantidad de puré
Tiempo:
- Preparación: 10 minutos
- Cocción: 50-60 minutos
Utensilios:
- Bandeja para horno
- Papel de aluminio
- Batidora o procesador de alimentos
- Cuchillo afilado y cuchara grande
Ingredientes para el puré de calabaza
- 1 calabaza de tamaño mediano (butternut o moscada, las más dulces)
Cómo hacer puré de calabaza casero
- Precalienta el horno a 200°C para que esté listo mientras preparas la calabaza.
- Lava bien la calabaza para eliminar cualquier resto de suciedad. Córtala por la mitad a lo largo y, con una cuchara, retira las semillas y los filamentos internos.
- Con un cuchillo, haz cortes superficiales en la pulpa. Esto ayudará a que se cocine uniformemente. Cubre la bandeja con papel de aluminio y ciérralo bien para evitar que se escape el vapor.
- Hornea durante 50-60 minutos, o hasta que la pulpa esté completamente tierna y se pueda pinchar fácilmente con un tenedor.
- Retira del horno y deja enfriar unos minutos. Con una cuchara, extrae toda la pulpa y descarta la cáscara.
- Coloca la pulpa en una batidora o procesador de alimentos y tritura hasta obtener una textura suave.
- Una vez triturado, coloca el puré en un paño limpio de algodón (puede ser una gasa o trapo de cocina) sobre un colador grande. Esto ayudará a eliminar el exceso de agua y a obtener un puré más denso y concentrado, ideal para postres y otras preparaciones.
- Junta los bordes del paño para formar un saquito y, si es necesario, presiona suavemente con las manos para acelerar el proceso de escurrido. Déjalo reposar durante al menos dos horas para que suelte todo el jugo. Recuerda guardar este líquido, ya que tiene un sabor dulce y delicioso que puedes aprovechar en otras recetas.
¿Cómo puedes usar el puré de calabaza?
Postres deliciosos
- Tarta de calabaza: Un clásico con un toque de especias como canela y nuez moscada.
- Muffins o bizcochos: El puré aporta humedad y un sabor especial.
- Galletas de calabaza: Ideales para acompañar una bebida caliente.
Platos salados
- Crema de calabaza: Mezcla el puré con caldo y especias para un entrante fácil y reconfortante.
- Salsas para pasta o risotto: Perfecto como base para una salsa cremosa.
- Rebozados: Úsalo para dar un toque diferente a croquetas o empanados.
Cómo usar el jugo de la calabaza
¡No tires el jugo que queda después de haber escurrido el puré de calabaza ya horneado! Este líquido dulce y lleno de sabor puede dar un extra a tus recetas:
- En bebidas: Úsalo como endulzante natural en tés, cafés o batidos.
- En sopas: Añádelo a cremas o caldos para potenciar el sabor.
- En postres: Mézclalo en masas de galletas, bizcochos o muffins.
Bebidas y snacks
- Smoothies: Mezcla el puré con plátano, yogur y un poco de miel o canela.
- Pan de calabaza: Una opción deliciosa para el desayuno o la merienda.
Consejos para un puré de calabaza casero perfecto
- Elige calabazas dulces: Variedades como butternut o moscada son ideales por su textura y sabor.
- Congela porciones pequeñas: Divide el puré en bolsas herméticas para tenerlo listo cuando lo necesites.
- Juega con la textura: Si prefieres un puré más ligero, añade un poco de agua, caldo o incluso leche al triturar.
Conclusión:
Hacer puré de calabaza casero es súper sencillo y te abre un mundo de posibilidades en la cocina. Desde postres hasta platos salados, su versatilidad y sabor lo convierten en un imprescindible para aprovechar al máximo esta temporada.
