Con el calor que llevamos padeciendo desde hace semanas al menos en Madrid, se me ocurrió que una buena idea para compartir con todos vosotros una receta tras un periodo de escribir más esporádicamente en el blog, sería esta fantástica receta de causa limeña. Por un lado pese a que yo soy capaz de encender el horno caiga quien caiga y haga la temperatura que haga, tengo también la capacidad de comprender que no todo el mundo padece la misma locura por hornear y cocinar como yo y por tanto compartir una receta fresquita como es este clásico peruano, me ha parecido la mejor de las ideas.