Le di muchas vueltas hasta que encontré la manera de utilizar todas las yemas que me sobran después de hacer merengues o macarons y es que cuando en los cursos de repostería que imparto tenemos alguna de esas dos clases, me acabo encontrando con más de una docena de yemas guardadas en la nevera. Antes de descubrir este bizcocho de yema tostada había probado con yemas de Ávila y con tocinillos de cielo, pero en mi casa no les hicieron mucho caso a ninguno de los dos. Algo bien distinto pasa con este bizcocho que incluso hacen cola para esperar a que terminemos de hacer las fotos para este post y abalanzarse sobre el bizcocho hasta que no queden ni las migas.
Bizcochos
El otro día me entraron unas ganas tremendas de hacer un bizcocho de algún cítrico que no fuera limón y no porque no me guste, más bien todo lo contrario. Adoro todo las masas aromatizadas con limón y por ese mismo motivo muchas veces abuso de ello y me paso un mes entero entre el bizcocho integral de limón con el que habitúo a desayunar y también el bizcocho de naranja que tanto gusta en casa. Entonces abrí la nevera para ver si algo de lo que contenía me inspiraba y…¡voilà! mis ojos se dirigieron directamente al bote de kumquats en almíbar que tenía bien guardaditos desde el otro día que hice la receta. Así que no me lo pensé dos veces y me puse manos a la obra para mostraros este maravilloso bizcocho de kumquats, fruta también conocida como quinoto o naranja enana.
Cake Pops de Vainilla y Chocolate
Últimamente me he aficionado a hacer Cake Pops y es que no pueden ser más sencillos de hacer y además hacerlos es de lo más divertido. Suelo ponerme con los niños en la cocina en el momento de bañarlos en el chocolate y decorarlos con toda la variedad de Sprinkles que teníamos gracias a una promoción muy chula de la que os hablo un poco más abajo. A ellos les encanta y a mí, verles con las manos en la masa me gusta todavía más :-)
Para el que no conozca este pequeño pastelito, los Cake Pops son básicamente un trozo de bizcocho (del sabor que más nos guste) clavado en un palito y bañado en chocolate con leche, chocolate negro, chocolate blanco o candy melts y finalmente decorado con infinidad de opciones, sprinkles de colores, trocitos de almendra, decoraciones de fondant etc… y cuyo resultado final es un postre en forma de chupa chups que realmente está muy bueno y además es de lo más vistoso, lo que lo hace perfecto para celebraciones, mesas dulces o para hacer un regalo a alguien especial.
Qué ganas tenía de publicar ya un post y es que la semana pasada entre salidas con la bici, preparación de nuevos cursos, deberes y más deberes de los niños y unas cuantas actividades más, no encontré el momento para sentarme a escribir en este espacio que tanto me gusta y que tantas cosas bonitas me da.
Con este Bundt Cake marmolado empezamos la semana de la mejor de las maneras o al menos para mí ya que se trata de un cake maravilloso con una perfecta combinación de sabores, en este caso ni más ni menos que vainilla y chocolate. Y siendo mis dos ingredientes favoritos en pastelería, sobran las palabras para describiros el resultado final. Os recomiendo que lo probéis porque además de estar rico, riquísimo, visualmente es un postre bonito y diferente por los dibujos que formamos a propósito con las dos masas emulando la superficie de un mármol. Más abajo os enseño un paso a paso gráfico sobre cómo hacer el dibujo de un bizcocho marmolado para que las dos masas queden perfectamente integradas y para que la distribución sea lo más uniforme posible.
Lo que tenemos en mi casa con las Jaffa Cakes, que muchos conoceréis como Pim´s, es más que vicio y es que yo misma soy capaz de comerme casi un paquete entero de una sola sentada. No se qué es lo que tienen esta mezcla entre galleta y bizcocho, pero si las has probado seguro que me entiendes y si no lo has hecho, tienes hoy la oportunidad de hacerlas tú mismo con la receta que más abajo comparto con vosotros o también tienes la opción de comprarlas, pero la verdad es que me parece que son un poco caras (en torno a los 2€) para lo que duran en mi casa y teniendo en cuenta que no hay manera de comerse solo una (de verdad que no la hay).
Cada vez que hago este espectacular bizcocho me pregunto por qué no lo haré más a menudo, ya que el Angel Food Cake y en particular el Angel Food de Chocolate es de esas cosas que cuando las saboreas te hacen cerrar los ojos y sentir todo su sabor y su increíble textura propia del más dulce y tierno algodón. Y es entonces cuando me hago ilusiones pensando que puedo abarcar todo lo que mis deseos y mis pensamientos me hacen creer en ese momento llevándome a hacer pensar que una vez a la semana podría hacer el bizcocho integral de limón mas rico que haya probado jamás para así desayunar al menos la mitad de la semana con un rico bizcocho casero, o que los domingos debería hacer mucho pan casero y congelarlo para cada día tener en la mesa una barra u hogaza recién horneadas o que un día podría levantarme un poco antes de la hora habitual para hacer de desayunar una de las cosas que más me gustan del mundo, tortitas con sirope de arce…
Espero que os guste este bizcocho de naranjas y almendras tanto como nos ha gustado a nosotros, porque además os digo que no puede ser más fácil de hacer, ya lo veréis.
Si el otro día me dio por utilizar las almendras que tenía en la despensa con las galletas de almendra que os mostraba, ahora me ha dado por las naranjas y es que es una fruta que en casa consumimos todo el año, tanto en zumo como la pieza entera.
Y no lo voy a decir muy alto, pero este otoño/invierno llevamos muy pocos resfriados en casa y eso que el frío no da tregua (como es lógico y normal). Pienso que el zumo de naranja que habitualmente tomamos todos en casa cuando nos levantamos ayuda mucho a mantener las defensas a raya, aunque también pienso que se trata más bien una combinación de una dieta saludable y variada lo que nos hace estar fuertes y sanos :)
El Brownie con salsa de caramelo y frutos secos que os traigo hoy creo que ha batido el récord de tiempo en el que ha estado expuesto encima de la mesa y es que creo que no llegó ni a 5 minutos ya que lo hice el otro día para una merienda con mis amigas del alma. A pesar de la panzada a comer de las Navidades que acaban de pasar, hay algo de lo que nunca me harto ni me hartaré y esto es por supuesto el dulce y para ser más exactos, si el dulce en cuestión lleva chocolate entre sus ingredientes es muy pero que muy difícil que pueda decir que no.
Así que como veis, por si no hubiéramos tenido poca comilona estas fiestas, ni corta ni perezosa se me ocurrió recibir a mis queridas amigas con este Brownie del que no puedo decir más que tanto la textura como el sabor y la combinación del chocolate intenso con la salsa de caramelo, han hecho que lo coloque en el top ten de mis postres favoritos.
Hacía tiempo que no hacía ningún Bundt Cake y después de hacer y sobretodo de probar este Bundt Cake de Chocolate y Café que os traigo hoy, me han entrado unas ganas locas de utilizar de nuevo todos y cada uno de los moldes que tengo destinados para hacer este tipo de cakes tan maravillosos tanto en aspecto como en sabor y textura.
Lo único malo es que me he llevado absolutamente todos los moldes de Bundt Cake al taller y los he colgado en una de las paredes con el doble fin de almacenarlos cómodamente y también como elemento decorativo. Por tanto cada vez que vamos al taller suelo traerme un par de moldes a casa por si se me ocurriera hornear algo, que de hecho suele ser bastante habitual en mí :-)
Hoy he querido estrenar la decoración navideña en la mesa con este maravilloso bizcocho de calabaza. Se acerca la Navidad y si os digo la verdad siempre he disfrutado mucho de esta época.
De las cosas que más me gusta hacer es encontrarme con la gente que quiero, ya que parece que esta época invita al esfuerzo por parte de todos para que los reencuentros se produzcan, aunque también pienso que de ninguna manera debería ser así y deberíamos todos esforzarnos más el resto del año por dejar de lado un rato el ritmo frenético al que estamos acostumbrados, para regalarle parte de nuestro tiempo a la gente que suma en tu vida, aquellos que sonríen al verte y aquellos a los que echas de menos cuando no estás a su lado.
Disfruto mucho de esos momentos y si es en torno a una mesa con un café o un te acompañado con un bizcocho de calabaza como el que hoy os muestro, el encuentro será seguro inolvidable :-)