Estas galletas son ideales para hacer con niños, porque no requieren mucha elaboración, ni estirado con rodillo ni tampoco hace falta que la masa se enfríe en la nevera ya que no se corta con corta pastas. Además no llevan huevo, así que los alérgicos al huevo pueden comerlas sin ningún problema.
Las comí por primera vez en un curso al que fui de Julia de Postreadicción, una mujer de la que se puede aprender mucho, porque sabe hacer de todo y bien. nos las puso en la mesa para merendar mientras nos enseñaba a decorar galletas.