Hoy vengo con una de esas recetas que me encanta hacer sobretodo cuando vuelvo de vacaciones y tengo montañas de ropa por lavar y seis maletas que organizar. Pero como comer hay que seguir comiendo y a ser posible lo mejor que podamos, este año decidí hacer este rico pollo asado con cerveza que se fue haciendo mientras yo ponía orden al lógico caos que se forma cuando entras por la puerta de casa después de varios días de vacaciones y dejas todos los bultos amontonados en la entrada de tu casa.
Y además me ocurre que no puedo soportar tener cosas pendientes por hacer, ya que yo soy de las que entra por la puerta de casa y se pone como una loca a deshacer maletas y a poner lavadoras. Necesito de manera urgente ver todo colocado de nuevo y así poder dedicarme de lleno al trabajo y a organizar la vuelta a nuestra escuela anual el curso online de repostería y los cursos de cocina que impartiremos a partir del próximo mes de septiembre.
El caso es que como os comentaba, este plato es de esos que a penas requieren esfuerzo y atención por tu parte ya que se hacen prácticamente «solos» y con un resultado espectacular. Y mientras se asa nuestro pollo en el horno a mí me ha dado tiempo a organizar casi la mitad de lo que traíamos, que como os imaginaréis al ser 6 en casa no era precisamente poco.
Ya sabéis además que el pollo acepta un montón de ingredientes y puedes jugar perfectamente con las especias que tengas en tu despensa. Y eso es precisamente lo que me ocurrió un día que quería hacer pollo en el horno y que resultó que el día anterior me había llevado la última botella de vino blanco al taller para probar a hacer una receta y aunque no es imprescindible añadir ningún tipo de alcohol, a mí particularmente me parece que el vino le aporta un sabor y aromas muy característicos. Pues bien, abrí la nevera entonces para sacar un limón para añadírselo al pollo en cuestión y fue cuando vi un botellín de cerveza que parecía estar levantando la mano para que la cogiese y la utilizase en la receta. El resultado, un pollo de lo más jugoso y sabroso que te aseguro que repetirás una y otra vez porque al menos a nosotros en casa no nos ha podido gustar más.
Receta de pollo asado con cerveza:
INGREDIENTES:
- 1 pollo listo para asar
- 1/2 vaso de agua
- 1 botellín de cerveza
- el zumo de un limón
- especias al gusto (es opcional, yo utilicé tomillo que tanto me gusta)
- pimienta negra recién molida
- sal
- 500 gr. de patatas de guarnición (opcional).
- aceite de oliva
ELABORACIÓN:
- Precalentamos el horno a 200ºC con calor arriba y abajo.
- Lavamos bien el pollo bajo el chorro de agua fría tanto por dentro como por fuera y lo secamos bien con papel absorbente. Colocamos el pollo en el centro de una fuente de hornear y a su alrededor dispondremos todas las patatas.
- Regamos el pollo con un buen chorro de aceite de oliva y también con el zumo de limón y con el 1/2 vaso de agua. Lo sazonamos por ambos lados y también por dentro con sal, pimienta negra recién molida y la especia o especias que hayamos elegido.
- Introducimos el pollo en el horno y dejamos que se cocine a 200ºC. durante media hora. Cada 15 minutos más o menos le iremos dando la vuelta. A los 30 minutos añadiremos el botellín de cerveza vertiéndolo directamente encima del pollo.
- Dejaremos que se siga cocinando durante 60 minutos más tomando la precaución de ir regándolo de vez en cuando con el jugo que se ha formado.
- Pasados los 60 minutos dejaremos que el pollo se dore bien por toda la superficie y lo serviremos inmediatamente.
Algunas aclaraciones:
- Esta vez no me dio tiempo porque estaban todos desesperados por comer, pero algo que hago habitualmente cuando hago pollo asado con cerveza, es reducir un poco la salsa en una cacerola una vez que el pollo está cocinado con el fin de que coja un poco de cuerpo y espese ligeramente (punto demiglacé).
